No entristezcan al Espíritu Santo de Dios con la forma en que viven. Recuerden que él los identificó como suyos, y así les ha garantizado que serán salvos el día de la redención. (Efesios 4:30)
Líbrense de toda amargura, furia, enojo, palabras ásperas, calumnias y toda clase de mala conducta. (Efesios 4:31)
Por el contrario, sean amables unos con otros, sean de buen corazón, y perdónense unos a otros, tal como Dios los ha perdonado a ustedes por medio de Cristo. (Efesios 4:32
Padre: Que tu Reino venga pronto. Que se cumpla tu voluntad en la tierra como se cumple en el cielo. (Mateo 6:10)
Si perdonas a los que pecan contra ti, tu Padre celestial te perdonará a ti.
(Mateo 6:14)
Pero, si te niegas a perdonar a los demás, tu Padre no perdonará tus pecados.
(Mateo 6:15)
Y Jesús nos mandó que predicásemos al pueblo, y testificásemos que él es el que Dios ha puesto por Juez de vivos y muertos.
(Hechos 10:42)
De éste dan testimonio todos los profetas, que todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre.
(Hechos 10:43)
Hermanos, ¡escuchen! Estamos aquí para proclamar que, por medio de Jesús, ustedes tienen el perdón de sus pecados.
(Hechos 13:38)
Todo el que cree en él es declarado justo ante Dios, algo que la ley de Moisés nunca pudo hacer. (Hechos 13:39)
NO SE TRATA DE LO QUE TU PUEDAS HACER, SINO DE LO QUE EL SEÑOR PUEDE HACER A TRAVÉS DE TI POR CUANTO LE AMAS DE VERDAD Y POR TU OBEDIENCIA, INTEGRIDAD Y FE.
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